13/12/14

SAN FERTÚS







El artículo de esta semana está dedicado a un pequeño despoblado situado a poco más de dos kilómetros al norte de Boltaña cuyo nombre es San Fertús. El acceso más cómodo lo realizaremos desde la localidad de San Vicente, primero por pista y luego por bellísimo sendero. También es accesible desde la pista que conduce a Morillo de Sampietro, recientemente arreglada. 

San Fertús es uno de esos lugares donde parece que el tiempo se ha detenido, o, mejor dicho, donde se detuvo hace muchos años. Está aislado, alejado de la “civilización”, pero a pesar de los años de abandono, se mantiene digno. Quizá esto se deba a que nunca tuvo acceso rodado, y por ello, no ha sufrido un expolio tan evidente y llamativo como sí lo padecieron otros despoblados de la provincia.

En el nomenclátor del año 1887 San Fertús aparece citado como “casa e iglesia”, con un total de 8 habitantes, los mismos que aparecen el su único nomenclátor del pasado siglo XX, año 1930.

La vivienda es espectacular, aunque ha sufrido el derrumbe parcial de su cubierta. Es un edificio alargado y estrecho, de planta rectangular, con un pequeño patio en su fachada sur que se halla totalmente devorado por la maleza. Las ventanas y el balcón abren en su costado sur, para de esta manera, poder atrapar la luz solar más fácilmente.

Paralelo a ésta hay un segundo bloque, de aspecto muy parecido pero incluso algo superior en altura. Conserva la cubierta y podemos acceder a su interior sin gran dificultad, aunque con precaución. Allí localizamos un gran tonel de vino y diferentes utensilios y enseres, por lo que pensamos que quizá fue utilizado como edificio de apoyo de la vivienda, al menos durante los últimos años.


A corta distancia de la vivienda se sitúa la capilla de San Fertús. Se trata de un pequeño oratorio de nave única y planta rectangular con cabecera recta orientada al este. Subsisten a duras penas los arranques de la bóveda de medio cañón que cubría la nave. Aguanta en pie la bóveda de la cabecera, que era también de medio cañón, aunque algo más estrecha y de menos altura que la anterior. La cabecera también conserva las pinturas populares que la decoraban. El acceso se realiza por el oeste. La cubierta, ya derruida, era de lajas. Estimamos que es un edificio que no se puede llevar más allá del siglo XVII-XVIII. 


Artículo publicado en El cruzado Aragonés (septiembre 2018)


Fotografía 1; Llegada a San Fertús (Cristian Laglera)
Fotografía 2; Vivienda (Cristian Laglera)
Fotografía 3; Edificio de apoyo (Cristian Laglera)
Fotografía 4; Ermita (Cristian Laglera)
Fotografía 5; Cabecera (Cristian Laglera)